en el metro a las 7:58 en casa a las 15:23 en el banco de un parque a las 19:56 en un tren con destino a Dios sabe dónde en un sitio a una hora y el mundo siempre sigue y la gente viene y va pero tú sigues aquí y todo es lo mismo y nunca pasa nada. nadie va a parar por ti y nadie te va a esperar y la gente va a seguir yendo y viniendo y el mundo va a seguir girando. todo parece que está bien pero en realidad no lo está y no te das cuenta hasta que frenas y abres una carta o ves una foto o te acuerdas y te das cuenta de que, efectivamente, el mundo sigue girando y gira con o sin ti. y no hay nada que hacer. y de repente te matan un martes a las 18:19 y no hay nada que hacer y no hay nada que hacer y no hay nada que hacer. nada que hacer porque todo sigue y sigue y sigue y tú estás bien aunque no sepas dónde meterte para dejar de escuchar de ver de oler de sentir. seguro que la bañera no es un buen sitio ni para ti ni para nadie. echas de menos en silencio y a escondidas de ti misma pero es imposible escaparte. recuerda que las cabezas no explotan y que para bien o para mal sigues aquí y mañana también y mañana también y mañana también.